Hasta ahora, la mocita tenía un pequeño repertorio de palabras adaptadas: agua, caca, pan, toma y el nombre de mi hijo; pero desde hace unos días suelta unas largas parrafadas de sonidos hilados que parecen querer construir una idea con sentido.
Nos divierte jugar a adivinar lo que está diciendo.
El lunes mordió a su monitora de natación cuando ya estaba cansada de que la llevara de un lado para otro.
Echando la vista atrás nos damos cuenta de los cambios: Moon ya no se da golpes cuando se enfada, muerde menos, pellizca menos y se ríe más.
Con las vacaciones escolares, Thai nota más la presencia de la nena y a veces dice que quiere que se vaya ya. Luego la busca para jugar con ella.
Nos divierte jugar a adivinar lo que está diciendo.
El lunes mordió a su monitora de natación cuando ya estaba cansada de que la llevara de un lado para otro.
Echando la vista atrás nos damos cuenta de los cambios: Moon ya no se da golpes cuando se enfada, muerde menos, pellizca menos y se ríe más.
Con las vacaciones escolares, Thai nota más la presencia de la nena y a veces dice que quiere que se vaya ya. Luego la busca para jugar con ella.